Hot! Gallery Líderes adventistas en Europa observan un minuto de silencio por los eventos en París

[/caption]14 de noviembre de 2015 | Bečići, Montenegro | Victor Hulbert, División Transeuropea

Los líderes europeos de la Iglesia Adventista del Séptimo Día guardaron un minuto de silencio y solidaridad por la gente de Francia, después de los ataques nocturnos del 13 de noviembre, en los que murieron por lo menos 129 personas en París..

Los dirigentes de la iglesia en la División Transeuropea invitaron al podio a Mario Brito, presidente de la División Intereuropea, cuyo territorio incluye Francia, al comienzo del servicio de adoración el sábado de mañana, en un emotivo reconocimiento de la tragedia sufrida por el pueblo de Francia y, por extensión, por el resto de Europa.

“Hoy todos somos franceses”, dijo Mario Brito al grupo de 130 líderes adventistas y familiares que asistían a reuniones de entrenamiento en liderazgo en el país balcánico de Montenegro.

Expresó su “profunda consternación”, pero también su solidaridad con el pueblo de Francia.

Dijo también que ha estado en contacto cercano con Rubén de Abreu, presidente de la Unión Franco Belga de la iglesia. Aunque todas las iglesias en París se cerraron este sábado 14 de noviembre, como parte del estado nacional de emergencia, la Iglesia Adventista en París puso a disposición de las autoridades sus edificios y estuvo disponible para ayudar en cualquier forma posible, dijo.

El presidente Brito dijo también que se esperan tales tragedias “cuando la gente se aleja de las direcciones y la sabiduría de Dios”.

Los dirigentes de la iglesia y sus familiares guardaron un minuto de silencio mientras Daniel R. Jackson, presidente de División Norteamérica los dirigió en oración. Desde el ambiente de belleza y paz de Montenegro, el presidente Jackson oró en favor de las familias afectadas por la tragedia, los valientes policías y las autoridades y difícil situación que enfrentan.

“Nos estamos acercando al final de la experiencia humana, estamos viendo a través de las puertas”, dijo el presidente Jackson , en referencia a su esperanza en el pronto retorno de Jesús.

El presidente Jackson, quien estuvo presentando dos días de sesiones de entrenamiento titulado “Misión en Europa”, en las juntas de fin de año de la División Transeuropea, del 11 al 17 de noviembre, oró por sabiduría para cada dirigente y miembro de iglesia adventista.

“Mientras nuestro corazón se duele esta mañana…podemos ser instrumentos para dar a conocer a hombres y mujeres, niños y niñas, la gracia salvadora de nuestro Señor y Salvador” , dijo.

Lee el artículo “Los adventistas ofrecen oraciones y apoyo en la tragedia en París”.

El presidente de la División Transeuropea, Raafat Kamal, un ex director de ADRA , hizo notar que este no era solamente un problema de París, sino que tocaba de hecho cada vida. El presidente Kamal sabe algo respecto a la violencia y la tragedia, habiendo vivido a través de la guerra civil en Líbano.

La tristeza por lo ocurrido en París era visible en el rostro de Ian Sweeney, presidente de la Iglesia Adventista en el Reino Unido e Irlanda, al decir: “Aunque en nuestra comprensión profética sabemos bien que el mal y el derramamiento de sangre van a seguir plagando nuestro mundo hasta el retorno de nuestro Salvador, es de todas maneras nuestro deber representar y dar a conocer el amor de Cristo con quienes sufren y están de duelo, a través de nuestras oraciones, nuestro consuelo y acciones prácticas de bondad, según se presenten la oportunidades. Nuestra respuesta ante los hechos de odio debe ser actos de amor en Cristo”.

En una declaración e l viernes, el presidente de la iglesia adventista mundial, Ted N.C. Wilson, escribió: “Las personas y familias sufrientes en la tragedia que está ocurriendo en París, están en nuestro pensamiento y corazón. Oren por favor por el retorno a la seguridad y la paz”, y añadió: “Que las situaciones funestas como la presente nos despierten a todos a la necesidad de que Dios y su amor sean supremos en nuestra vida al ver ocurrir los acontecimientos proféticos que anuncian la pronta venida del Señor”.