Jóvenes emprendedores adventistas comparten los secretos de su éxito
3 de agosto de 2016 | Andrew McChesney, director de noticias, Adventist Review
Una multitud de jóvenes emprendedores escuchó cautivada el miércoles a una emprendedora serial que huyó de niña de Irak y a la dueña de una tienda de ropa que guarda el sábado compartieron los secretos de su éxito en la primera conferencia de jóvenes empresarios adventistas de la historia.
Unas 120 personas asistieron al día inaugural de los dos días de la conferencia Fruition Lab, al margen de la convención anual de Servicios e Industrias de Laicos Adventistas en Phoenix, Arizona, Estados Unidos. El evento, organizado por jóvenes emprendedores adventistas, tenía una asistencia limitada de 100 personas pero abrió sus puertas a participantes adicionales debido a la fuerte demanda.
“Los emprendimientos no solo tienen que ver con dinero. Implican crear valor y hacer cambios en el mundo”, dijo Jeff Tatarchuk, cofundador de Fruition Lab, en sus declaraciones de apertura. “Ese es el objetivo de Fruition Lab”.
Ese fue el punto que destacaron los jóvenes presentadores, cada uno de los cuales recibió 15 minutos para exponer. Los asistentes, sentados en pequeños grupos de ocho personas en mesas de una sala de reuniones de la iglesia adventista de Camelback, rápidamente tomaron notas en sus dispositivos móviles y cuadernos de notas provistos por la conferencia mientras escuchaban las breves y poderosas presentaciones.
La gestión del tiempo es clave para el éxito, y también es bíblica, dijo el presentador Clifford Almeida, cofundador y director ejecutivo de Diseños Web Hireawiz, una empresa con sede en Phoenix.
“Enséñame a contar mis días, para que obtenga un corazón sabio”, dijo Almeida, parafraseando Salmos 90:12.
Almeida, que nació en Papúa Nueva Guinea en el Pacífico Sur, dijo que cada día piensa en su gestión del tiempo, y que su emprendimiento ha crecido un 30 por ciento durante el último año gracias simplemente a la sistematización y automatización.
El secreto para una buena gestión del tiempo, dijo sin embargo, es “establecer un cronograma donde Dios esté primero”, y al mismo tiempo hallar maneras de dar a otros. Almeida dijo que cada año, su compañía dona 1000 horas de trabajo a causas benéficas.
Cerrado los sábados
Dena King, una de las dueñas de The Grey House, una tienda de ropas de montaña en Estes Park, Colorado, Estados Unidos, dijo que desde el comienzo decidió seguir un cronograma donde Dios ocupe el primer lugar y cerrar su tienda los sábados. Dijo que se rehúso a transigir aun cuando una amiga de ese pueblo turístico la regañó duramente por cerrar su tienda en el día de mayor movimiento de la semana. En su lugar, King colocó un cartel en la ventana de la tienda, que decía: “The Grey House está cerrada los sábados para que las dueñas puedan disfrutar de ese día con sus familias”.
El resultado, dijo ella, ha sido una inesperada oportunidad de compartir su fe con clientes curiosos. Los clientes también han llevado a cabo viajes especiales a su tienda los domingos para comprar allí.
“Abrir la tienda fue la mejor decisión de mi vida”, dijo King.
La joven agregó que la tienda ha demandado muchísimo trabajo, pero que Dios la ha bendecido al seguir el consejo de Eclesiastés 9:10, que dice: “Todo lo que te venga a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas”.
Fuertes aplausos por parte de la audiencia siguieron una presentación de Tina Blanco, una emprendedora e inversora serial cuya familia huyó de Irak hace más de tres décadas. Blanco fue bautizada a los 12 años pero, mientras luchaba por adaptarse a la vida en los Estados Unidos después de su pasado en Irak, abandonó la escuela después del séptimo grado. Comenzó su primer emprendimiento a los 14 años, administrando un pequeño equipo en un circuito de reparto de periódicos.
Blanco pasó a abrir una compañía de celulares cuando los celulares eran novedad, y entonces estableció una compañía de telefonía satelital que se especializó en ayudar en emergencias. Esa compañía abrió en junio de 2004, poco antes que el Huracán Katrina azotara a Nueva Orleans. Blanco dijo que la catástrofe básicamente desarrolló su empresa.
“Encuentren una industria que no esté funcionando”
“Mi secreto para comenzar una empresa en hallar una industria que no esté funcionando”, dijo Blanco. “Eso es lo que hice con la empresa de telefonía satelital”.
Blanco dijo que llamó a otras compañías de telefonía satelital para tratar de tener información antes de abrir su empresa, pero solo recibía mensajes de las máquinas contestadoras.
“Nadie respondía mis llamadas”, dijo. “Y decidió que me dedicaría a eso, y que lo haría las 24 horas, los siete días de la semana”.
Los asistentes, mientras tanto, expresaron su entusiasmo por las presentaciones, y al menos una de ellas dijo que la conferencia fue algo inspirado por Dios.
“Es una respuesta a la oración”, dijo Marice Damion Miller, de 35 años y fundadora de layporium.com, un mercado en línea con sede en Utah. “He asistido a otras convenciones de negocios, pero esto es algo que no solo me ha dejado una impresión duradera para el presente sino también una impresión duradera para la eternidad”.
Desde el escenario, los presentadores recordaron a los asistentes que sus acciones, en efecto, tienen consecuencias a largo plazo.
“Si ustedes ayudan a otros, eso siempre les regresará”, dijo Leslie Samuel, un blogger de Míchigan cuyos videos en línea de biología han atraído a más de nueve millones de vistas.
“Creen contenidos que inspiran a otros y que cambian al mundo mientras desarrollan su empresa”, expresó.
Fruition Lab, que es copatrocinado por la Adventist Review, está siendo grabado para ARtv, y será lanzado en el sitio web de la Adventist Review en las próximas semanas.