Santiago, Chile…[ASN] Desde el 15 al 19 de febrero en la comuna de Punitaqui, región de Coquimbo, se desarrolló con éxito el OPSO 2013. Más de 70 voluntarios de diferentes partes de Chile se dieron cita para ayudar a más de 60 familias de escasos recursos que llegaron hasta las dependencias del recinto minero Lomas Altas para recibir todo tipo de ayuda. Durante la mañana se instalaron los stands de peluquería, oftalmología, medicina general, orientación, espiritualidad, entre otros, que atendieron gratuitamente a todas las personas que llegaron al lugar. Eso fue acompañado con música cristiana, juegos y regalos para los niños que llegaban junto a los lugareños.
Luego de un rico almuerzo preparado por los voluntarios de OPSO (Operativo Social) y que fue repartido a más de cien personas, comenzó la entrega de sacos de ropa, colchones, muebles y quintales de harina según las necesidades de las familias, la alegría y el asombro se apoderaron del lugar al ver tanta generosidad por parte de los jóvenes adventistas. En tanto los niños no se quedaron con las manos vacías, ya que cada uno recibió dulces y juguetes según se había estipulado en el censo realizado por los voluntarios semanas atrás.
Además, el alcalde de Punitaqui, Pedro Valdivia, dio las gracias a toda la Iglesia Adventista chilena por todo el amor entregado en esos días a través de toneladas de ayuda. “Nuestra gente está pasando por malos momentos, la sequía que nos afecta ha dejado muchas pérdidas. Hay varias personas que no tienen agua y no tienen como sobrevivir ante tanta necesidad” aseguró el edil. También concejales y funcionarios municipales de Punitaqui ayudaron de forma desinteresada para que se pudiera realizar el evento. A cada una de las autoridades como también a las familias beneficiadas se les hizo entrega de un libro misionero y una biblia.
Pilar Pizarro, directora de OPSO 2013, agradeció infinitamente a todos los voluntarios que participaron en esta campaña solidaria, “estamos felices porque hemos podido aportar y ayudar desinteresadamente a esta gente de Punitaqui que está sufriendo bastante a raíz de la falta de agua y el difícil acceso a sus viviendas”, señaló. Además, dijo que a cada una de las familias se les visitó en sus hogares para hablarles de Jesús e invitarles a estudiar la biblia.
OPSO es organizado por el Departamento Social de Jóvenes de la Iglesia Adventista del Séptimo Día “Agrupación Coral Fe y Esperanza”, grupo compuesto por casi cien jóvenes profesionales voluntarios de diversas áreas como son: ingeniería, salud, trabajo social, educación y técnicos profesionales de diferentes ámbitos, quienes apoyan anualmente en forma desinteresada en las diferentes funciones y responsabilidades que conlleva la planificación y desarrollo del programa.
La principal preocupación de OPSO es conocer las necesidades espirituales, sociales y materiales de pequeños poblados que habitan en zonas precordilleranas de Chile, para luego asistir con ayuda básica concerniente a los tres focos ya mencionados. [Equipo ASN, Joaquín Pinchera] |