En Caracas, 4012 nuevos creyentes son bautizados en la Iglesia Adventista durante histórica celebración de evangelización
18 de abril de 2016 | Caracas, Venezuela | Libna Stevens/DIA
La Iglesia Adventista del Séptimo Día bautizó 4012 nuevos miembros durante una histórica celebración de evangelización en Caracas, Venezuela, el 16 de abril de 2016. Más de veinte mil personas presenciaron los bautismos en el Estadio Universitario de Caracas, marcando así la culminación de ocho meses de intensos esfuerzos de evangelización a lo largo y a lo ancho de la Unión de Venezuela Oriental.
Algunos viajaron durante más de 36 horas por agua, tierra, en automóvil o autobuses para participar de las festividades del día, comprometerse nuevamente a compartir la esperanza en sus comunidades, y elevar oraciones por los líderes del gobierno y el pueblo de Venezuela.
“Estoy emocionado más allá de las palabras por la dedicación de nuestros líderes, pastores y feligreses simplemente para estar aquí”, dijo el pastor Josney Rodríguez, presidente de la Iglesia Adventista en la región de Venezuela Oriental. “No es ningún secreto que nuestros miembros están luchando de tantas maneras, aunque su compromiso con la misión de la iglesia ha sido algo increíble de ver”.
El evangelismo en Venezuela Oriental. Se necesitó el trabajo conjunto de pastores, líderes de grupos pequeños y laicos en los cinco mil grupos pequeños diseminados por las ocho asociaciones y misiones de Venezuela Oriental para producir el éxito en la evangelización, dijo Rodríguez. Tan solo en Caracas, se llevaron a cabo esfuerzos de evangelización en ochocientos grupos pequeños, lo que llevó a doscientas campañas de evangelización de cosecha a cargo de evangelistas locales e internacionales de todo el territorio de la División Interamericana en las iglesias la semana pasada.
También se establecieron cien nuevas iglesias, gracias a los pioneros de Misión Global que ayudaron a establecer nuevas congregaciones en el territorio de la unión.
El evento se convirtió en el primero de su tipo organizado por la iglesia de Caracas, y el más grande impacto de evangelización llevado a cabo en los 106 años de historia del adventismo en el país, añadió Rodríguez.
La celebración del día también fue parte del lanzamiento oficial de la iniciativa quinquenal de evangelismo de la División Interamericana que busca motivar a los 3,8 millones de miembros a buscar una transformación diaria en Cristo, participar más de la vida de la iglesia, y comprometerse con la tarea de compartir el amor de Cristo en sus comunidades.
Habla el pastor Wilson
El pastor Ted N. C. Wilson, presidente de la Iglesia Adventista mundial, animó a los presentes para que busquen una relación con Cristo, estudien la Palabra de Dios y permitan que el Espíritu Santo produzca cambios en sus vidas. Esta fue la segunda visita del pastor Wilson a Venezuela.
“Permitan que Dios los use para hacer una diferencia en Venezuela y en cualquier otro lugar donde se encuentren”, dijo el pastor Wilson al instar a los miembros para que busquen una transformación en Cristo a cada momento del día.
“Tienen la oportunidad de dar esperanza a la gente, de compartir aliento y ayudar a que las personas vean el futuro brillante que les espera, a pesar de los desafíos que enfrentan cada día”, dijo el líder adventista. “Permitan que Dios los use para testificar de la manera en que Dios está transformando la vida de las personas que los rodean”, añadió. “Pueden perderlo todo, pero tienen a Cristo, y él puede transformar sus vidas”.
Mientras los nuevos miembros tomaban su voto bautismal, cada uno de ellos lanzó un globo como testimonio de su compromiso en seguir a Jesús y buscar una transformación diaria en Cristo. Los globos de helio llevaban el logotipo de la iglesia y una nota con un versículo y un mensaje de esperanza atado al hilo.
El pastor Wilson fue entonces acompañado por el pastor Israel Leito, presidente de la División Interamericana, mientras eran testigos de los pastores y ancianos de iglesia que bautizaron a los nuevos miembros en las setenta piscinas inflables ubicadas a lo largo del extremo exterior del campo de béisbol del estadio.
Nuevos miembros
Freddy Morocoima, de 22 años, fue uno de los bautizados. Freddy viajó durante casi dos días desde La Gran Sabana, en el sudeste de Venezuela, para ser parte de la celebración especial.
“Hoy siento gran gozo en mi corazón; me siento como una persona completamente nueva”, dijo Morocoima, que proviene de Mesek Meru, una comunidad indígena. El joven dijo que su vida estaba llena de enojo, de alcohol y tabaco casi todos los días, pero que un día, su suegro lo invitó a asistir a un grupo pequeño, que estaba llevando a cabo una semana de oración. “Quedé tan impresionado y emocionado por el mensaje que seguí asistiendo, y comencé a sentir que en mi vida se producía una transformación”, dijo Morocoima, quien siente que Dios más que le salvó la vida, porque estaba a punto de perder a su esposa y a sus dos hijos pequeños. “Mi vida tiene un nuevo significado, y dejado atrás los malos hábitos”, dijo Morocoima, que trabaja para las Fuerzas Armadas. Ahora sueña con ser pastor y alcanzar a los miembros de su comunidad que necesitan un Salvador.
María Iriza ha hallado la paz que había estado buscando durante la mayor parte de su vida. Iriza dice que su historia es larga, y que comenzó cuando su madre la abandonó de pequeña, obligándola a vivir en las calles expuesta a las drogas y la violencia, y convirtiéndose en madre soltera a los 15 años.
“Mi vida cambió cuando comencé a estudiar los estudios bíblicos “La fe de Jesús” con una amiga hace unas semanas”, dijo Iriza, que estuvo entre los cientos que asistieron a las campañas de evangelización en Caracas. Durante la campaña de evangelización de la semana pasada en la iglesia adventista de El Paraíso, decidió entregar su corazón a Cristo junto con su esposo, su hijo de 10 años y su hijita de 4. “En el transcurso de una semana, me casé con mi esposo, Dios obró para que él no tenga que trabajar en sábado, y ahora estoy siendo bautizada” dijo Iriza.
“Dios me quitó el enojo, mi actitud agresiva y me dio paz. Él me enseña cada día a confiar en él y a permitirle que me guíe y proteja a mi familia de una manera poderosa, mientras criamos a nuestros hijos para que sigan en las huellas de Cristo”.
Fidelidad en Venezuela. Hay otras 4010 historias de transformaciones en Venezuela. Son historias de fe, de nuevos miembros que decidieron que sea Dios quien los guíe a través de cualquier crisis.
El pastor Ricardo Marín, secretario de la Unión Centroamericana Sur de la Iglesia Adventista, que supervisa la obra de la iglesia en Costa Rica y Nicaragua, dice que vio de primera mano de qué manera los miembros de iglesia de Venezuela están comprometidos en confiar en Dios aun cuando no tengan para comer. Marín fue uno de los 51 ministros de la División Interamericana que viajaron a Venezuela para ponerse al frente de las campañas de evangelización de cosecha de la semana pasada. Le asignaron predicar en la iglesia adventista Alto del Águila, en las afueras de la ciudad de Caracas.
Marín se emocionó al saber que una miembro no había podido comprar alimentos durante más de una semana, porque le había asignado el sábado como día de compras.
“Decidió que confiaría en Dios en lugar de ir a comprar en sábado, y tuve que quedarse sin comida”, dijo Marín. “He quedado asombrado al ver que todos los miembros están llenos de amor y están dedicados a compartir el amor de Dios con lo poco que tienen o no tienen. No les importa pasar hambre, porque creen y confían en Dios”, dijo Marín. “Vine a bendecir a la gente de la iglesia con la Palabra de Dios, pero he sido transformado y bendecido con el derramamiento de amor y generosidad”, dijo Marín, que ha predicado en Trinidad, Jamaica, México y América Central cada año como parte de la iniciativa de evangelismo del territorio.
“El Señor provee, y estoy tan emocionado por el espíritu dadivoso, por la confianza y la lealtad a Dios que tienen nuestros miembros”, dijo Rodríguez. El sábado pasado, el 9 de abril por la mañana, después de enseñar la Escuela Sabática en una iglesia en Caracas, una miembro compartió cómo alababa a Dios porque no había podido comprar alimentos, pero había hallado dos plátanos en su casa, y esa había sido su comida. “Su fuerza es la misma que tienen todos los miembros del territorio de la unión. Dios nos ha bendecido inmensamente, y sigue haciéndolo aun frente a los desafíos que enfrentamos”.
La iglesia sigue creciendo en la región Venezolana Oriental, que cuenta con 158 mil miembros. El territorio tiene 112 pastores que supervisan a 814 congregaciones. “Muchos pastores han dejado el país, por lo que comenzamos una capacitación especial para los primeros ancianos de la unión, para que ellos estén plenamente equipados para dirigir las congregaciones junto con pastores que los supervisan”.
“Dios ha hecho grandes cosas en Venezuela, y estamos agradecidos porque allí hay libertad religiosa”, dijo el pastor Leito, quien ha viajado al país decenas de veces durante su ministerio en Interamérica. “En verdad admiramos el espíritu de nuestros miembros en Venezuela, porque permanecen fieles y están siempre alegres en medio de los desafíos”, añadió el pastor Leito. Los miembros de Venezuela siguen siendo generosos en sus diezmos y ofrendas, explicó. “Lo que sucede es que cuando convertimos esos fondos a dólares, la diferencia es muy significativa”.
El pastor Leito explicó que hace años, el salario de un pastor equivalía a 1400 dólares, pero que en años recientes ha disminuido a unos 25 dólares debido a la devaluación de la moneda. “Somos agradecidos a Dios por la manera en que él sigue bendiciendo a los feligreses comprometidos de Venezuela”.
Fue apropiado lanzar la iniciativa quinquenal de evangelismo de la División Interamericana denominada “Señor, transfórmame” desde Caracas, comentó el pastor Leito.
El pastor Rodríguez dijo que no fue fácil coordinar un encuentro tan grande. “A cada paso del camino vimos milagros, desde el momento en que comenzamos a alistarnos para la iniciativa con nuestros líderes, pastores y laicos, hasta la coordinación de cada detalle del programa en el estadio”, añadió.
La celebración contó con la participación de unos mil integrantes de coros, seiscientos de bandas y una orquesta de doscientos integrantes que contó con músicos de toda la unión. Otros cientos ofrecieron chequeos de piel y odontológicos durante las horas de la tarde, como parte del impacto comunitario “Cerca de ti, Caracas” que la iglesia ha organizado durante los últimos tres años.
El evento se convirtió en uno de los principales temas de tendencia de Twitter en Venezuela, dijo Abel Márquez, director de comunicación de la Iglesia Adventista en Interamérica, con más de 16 mil tuits en la etiqueta oficial del evento “SeñorTransformame”.
El evento de la mañana quería ser transmitido vía satélite pero debido a cuestiones técnicas, la transmisión tuvo que ser pospuesta para una fecha posterior, explicó Márquez.
La iniciativa “Señor, transfórmame”. La iniciativa “Señor, transfórmame” ha tenido un gran impacto en la región Venezolana Oriental, dijo el pastor Balvin Braham, asistente del presidente de la DIA para evangelismo y organizador del plan quinquenal. “La iglesia ha adoptado esta iniciativa como propia, y la ha hecho funcionar de manera exitosa”, dijo el pastor Braham.
“Es un momento especial en la vida de la iglesia de la División Interamericana, porque sus esfuerzos son un claro ejemplo de cuán efectiva puede ser la iniciativa en todo el territorio de la División Interamericana”, explicó Braham.
“Hoy día la iglesia de Interamérica pasará de la iniciativa de evangelismo estratégico ‘Visión un millón’ a la iniciativa ‘Señor, transfórmame’”, dijo Braham. “Ambos son paradigmas diferentes, pero la misión sigue siendo la misma”.
“Visión un millón”, explicó, buscaba involucrar a un millón de miembros capacitados para alcanzar a sus comunidades y ciudades con el mensaje de la segunda venida, algo que resultó en 1.041.165 bautismos durante el período 2010-2015. “La iniciativa ‘Señor, transfórmame’ es una oración personal basada en Romanos 12:2 que está enfocada en la renovación de la mente para que realmente hagamos lo que el Señor espera de nosotros”, añadió.
La iniciativa incluye un esfuerzo de colaboración de todos los ministerios de la iglesia durante cada iniciativa espiritual y actividad de la iglesia fortalezca a la iglesia local y la comunidad que la rodea, explicó Braham.
“Estamos buscando motivar a nuestros miembros para que se involucren de manera total en la misión de la iglesia, siendo transformados en su forma de vivir, de adorar, de servir y proclamar el evangelio, permaneciendo conectados y listos para la segunda venida de Cristo”, añadió Braham.
Los líderes de la iglesia ya están aguardando con ansias el próximo impacto en todo el territorio que se llevará a cabo en la Unión Interocéanica de México a comienzos de abril del año que viene.
Si desea ver una galería de fotografías del lanzamiento del programa “Señor, transfórmame” de Interamérica desde Caracas, Venezuela, visite HER